La inquisición gobierna el derecho en Brasil

Por equipo Mate amargo

La derecha brasilera necesita a Lula en la cárcel. Temer, acusado con pruebas contundentes, de graves hechos de corrupción, sabe que si Lula llega al poder  irá preso. El ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, favorito para las elecciones de octubre, fue objeto de una orden de prisión expedida por el juez de primera instancia Sergio Moro. El mismo que lo condenó en un juicio   plagado de arbitrariedades y manipulaciones, sin que se presentara una sola prueba en contra del ex presidente Lula.

El Tribunal Federal Regional de Porto Alegre, la segunda instancia que confirmó y aumentó la condena de Lula, como Sergio Moro, rechazaron siquiera recibir los recursos que habían sido presentados por la defensa del ex presidente.

Moro se ha ganado la crítica de las mayores figuras del derecho por su flagrante desapego a la ley. La Asociación Americana de Juristas, organización no gubernamental con estatuto

consultivo en las Naciones Unidas, expresa su grave preocupación ante el inminente

juzgamiento por el Supremo Tribunal Federal del habeas corpus impetrado por el más

importante líder popular del país, su Ex Presidente Luiz Inácio Lula da Silva, que

trasciende a su persona y fijará importante tesis para toda la población y ciudadanía.

Desde que se conoció la medida de detención de Lula hasta las 17 horas de hoy, Brasil alcanzará un pico de tensión difícil de imaginar. Al atardecer de ayer, tras conocer la decisión del juez Moro, el ex presidente Lula se dirigió a su antiguo gremio desde donde siguió analizando con sus asesores la resonancia política. La Central Unica de Trabajadores del Brasil se apresta a movilizar, en tanto las agrupaciones de izquierda, de los movimientos sociales llamaban a organizar la ocupación en las calles. Se supone que la hora señalada será a las 17 y a pesar de que el pueblo brasilero no se destaca por ganar masivamente las calles con regularidad, comparado con nuestro pueblo, por ejemplo, se estima que podríamos asistir esta tarde a un nuevo escenario político, que algunos pretenden comparar con el 17 de octubre de la historia popular, peronista, de nuestro país.

Lo cierto es que hay una medición de fuerzas brutal, con grave riesgo de detonar estallidos sobre los cuales siembran la derecha mediática que alza la figura de la intervención militar. O Globo a la cabeza y el sistema de todos los medios corporativos que buscan mentiras mediante afianzar un régimen neoliberal que a vistas se derrumba, y en su caída busca debilitar la reorganización popular.

Equipo Mate amargo