Agencia CHEAmerica del Sur

El desarme de los golpistas en Brasil

Lula denunció el apoyo de policías y militares a las acciones criminales de las hordas fascistas. Movilizó la unidad de acción con pulso político firme para visibilizar a los responsables materiales y quiénes financiaron el asalto al gobierno.

Por Omar López

El presidente Luiz Inácio Lula da Silva dejó en claro su decisión de identificar y desarmar a los terroristas, protagonistas del primer ensayo de golpe; «vamos a investigar» quiénes fueron los manipulados y quiénes los responsables intelectuales que no se hicieron presentes en el Palacio del Planalto para realizar las tomas y generar un clima de ruptura institucional. «

El tres veces presidente de Brasil conoce y padeció en carne propia la inteligencia, impunidad y la mano de obra criminal de la derecha y el poder económico que la mueve.

Lula y su firmeza de carácter político con el gesto de gobernante dispuesto a enfrentar, desarmar y castigar con todo el peso de la ley a las derechas golpistas.

El presidente se dirigió a la noche del lunes al Supremo Tribunal Federal (STF) en el centro de Brasilia. Marcho por la plaza central de la capital, junto a la titular del STF, Rosa Weber, el vicepresidente Geraldo Alckmin, gobernadores, senadores y diputados.

El flamante gobierno, de inmediata reacción intervino, el gobierno federal de Brasilia y logró el repudio y respaldo público de todos los gobernadores que se movilizaron al Palacio del Planalto. Recorrieron junto al jefe de Estado un edificio destrozado por la organización de asaltantes, trasladados en decenas de micros desde distintas provincias y escoltados por fuerzas de seguridad que liberaron la zona con total impunidad.

La rápida determinación de Lula fue decretar la intervención del gobierno bolsonarista de Brasilia y controlar a su policía local, como ordenar el inmediato desalojo de los campamentos de civiles apostados frente a los cuarteles militares y detener a un millar de activistas que serán investigados y sometidos a la justicia.

El flamante presidente de Brasil tiene claro los tiempos veloces que se juegan para afirmar su gobierno democrático, de unidad popular. No ignora que el plan golpista en Brasil es una pieza maestra de la reacción de ultraderechas en la región.

La crisis en Perú con la inteligencia de una derecha parlamentaria, militar, judicial y mediática es con sus variantes similar al acoso del poder económico en Argentina, y en Bolivia, con la intención de crear inestabilidad y golpe al gobierno boliviano de Arce.

Lula afirma su iniciativa y ancha unidad política con un respaldo popular e incluso empresarial y mediático que repudian el alzamiento bolsonarista.

La unidad para la acción democratizadora de Brasil tendrá un movido cambio de roles políticos en el Parlamento carioca. Hoy muchos aliados de Bolsonaro y del “partido militar” toman distancia del fugado ex presidente, por ahora en Estados Unidos.

Todo un desafío para los sectores autodefinidos democráticos en nuestro continente. En una etapa de definición política con vista a fortalecer los mandatos populares y replantear la cualidad y calidad de la unidad para enfrentar el poder real y todos sus mecanismos de inteligencia golpista.

La batalla por una democracia en disputa con el protagonismo popular y la inteligencia política que gane todas las iniciativas sobre los manuales de las derechas golpistas, hoy juega su partido final.

olopez

Más de 35 años en la comunicación nacional y popular Una propuesta audiovisual en formato de radio y de tele (Mateve/YouTube) Construcción de ideas alternativas en el campo de la batalla cultural Ejercicio de comunicación plural de frente a la unidad en la diversidad Idea y conducción, Omar López. Suscribite a Mate amargo