Agencia CHE

La mesa política no está servida

Por Mate amargo

El presidente Alberto Fernández busca arrimar a gobernadores para iniciar un espacio clave de definición política electoral estratégica. Desde la Casa Rosada el albertismo intenta recuperar y ampliar la convocatoria frustrada en el mes de enero en Mar del Plata.

Ante el escaso tiempo que resta para un armado electoral, que defina líneas centrales de acción y amase la diversidad de enfoque e intereses de las principales referencias que son sostén del capital electoral; la necesaria mesa táctica del Frente de Todos no logra juntar a Alberto, Cristina, Massa y las decisorias referencias políticas provinciales. Cada línea tantea su pre armado de aliados y sondea el presupuesto de negociación, midiendo la fuerza potencial y negociando los diferentes enfoques partidarios e intereses poderosos que están jugando a la hora de definir una propuesta electoral.

La lupa sobre los candidatos no hace foco aún, sólo aparece algo más nítido la búsqueda de respaldo de los aspirantes; votos, territorio, acuerdos cruzados por intereses económicos. El Frente del oficialismo navega con viento cruzado y carga con el peso crítico de las bases militantes, descontentas con las conducciones, desnutridas de una escucha por sus referencias inmediatas y descontentas con la acción de gobierno.

No es difícil recorrer el pensamiento político que se cruza por las rutinas militantes, en la primera línea de fuego frente a una poderosa demolición de la derecha, y en la penúltima línea de los debates.

El presidente impulsa a la coalición a resolver una síntesis de campaña electoral. La pregunta exiliada es cuál sería esa síntesis, cómo se resignifican los urgentes y desafiantes aspectos políticos; el malestar social ante un ajuste sin tregua que la paritaria sólo resuelve para un sector de la sociedad, quedando por fuera la gran mayoría. Malestar muy caliente en la supervivencia diaria cuando hay que enfrentar el terrorismo de marcación de precios por un puñado de poderosos empresarios parte del plan de demolición del gobierno por el poder real.

Quién, cómo, y en qué espacio de tiempo político se los enfrenta. Es una de las madres de una batalla que no se resuelve ya con la lógica de supervivencia del gobierno frente al poder económico, mediático y judicial.

Por caso, el proceso parlamentario de inicio de prueba para inicio de jucio político a los integrantes de la Corte Suprema navega desarticulada de una movilización integran; suena pragmática, pero es una cuestión en carne viva de permanente asignatura del FdT. La cuestión es que la intención de confrontar debe, precisamente, tener un comando frentista que articule la fuerza de movilización.

A esta altura pensar que cierre un acuerdo sobre una mesa electoral estratégica; desde las líneas cercanas a la vicepresidenta se hace notar que esa mesa debería discutir decisiones de gobierno. Para el núcleo del presidente eso sería una mesa no querida. Sin embargo, Cristina y Massa ofrecen disposición a esa discusión que podría sortear en parte la dispersión.

Cuál sería entonces “la carga” electoral del FdT si subsiste la incompatibilidad política.

En tanto sectores del peronismo, (CGT), con poder de negociación hacia el PJ y con puentes con el poderoso empresariado, mantienen equidistancia mientras negocian con gobernadores e intendentes. La cuestión es cómo quedarse dentro del sistema, cosechar las prebendas y que nada se altere en la ficción de una democracia que está en carne viva, mientras sólo beneficia la infinita super abundancia del gran poder económico y su articulación con la ultraderecha y su nuevo sistema de control del poder.  

El tiempo corre y obliga a definir cuestiones sensibles; Massa mirando ese reloj que marca las urgencias anunció este viernes, un mes antes, la continuidad de Precios Cuidados. Al pasar, sigue el desabastecimiento y no se logra desarmar la lógica que lleva a que Precios Cuidados no lleguen directo a los negocios barriales. Los pequeños comercios acuden al mayorista y pagan de más.

Mientras la inflación no sigue boxeando, en el rincón del ring sigue arrinconada la decisión política de intervenir sobre las maniobras que llevan el precio del pan a un plano de escándalo. Lo mismo con las verduras. En tanto los ajustes en las boletas de los servicios de luz, agua, gas, obras sociales, etc, siguen pegando duro.

La mesa política electoral esta cruzada por dos verdades, resolver las necesidades, un derecho del pueblo o perderse en esquema de la lógica impuesta por el poder real.

olopez

Más de 35 años en la comunicación nacional y popular Una propuesta audiovisual en formato de radio y de tele (Mateve/YouTube) Construcción de ideas alternativas en el campo de la batalla cultural Ejercicio de comunicación plural de frente a la unidad en la diversidad Idea y conducción, Omar López. Suscribite a Mate amargo